Se denomina fuego clase C a las llamas que se originan en combustibles gaseosos inflamables, como butano o propano. Los extintores más utilizados para apagar un fuego clase C son el extintor ABC y el de CO2.
Según el combustible en el que se originan, hay una clasificación de tipos de fuego. Tienen diversas características, y el modo adecuado de apagarlos varía. Intentar extinguir un fuego con los medios incorrectos puede desembocar en un accidente grave.
Además del fuego clase C, es necesario conocer los demás tipos de fuego para saber cómo protegerse ante ellos. Si quieres saber más sobre las diversas clases de fuego y con qué extintor combatirlas, te lo contamos en el siguiente enlace.
Ahora que sabes lo que es un fuego clase C, te contaremos cuáles son las mejores opciones para apagarlo. Hay varios medios para hacerlo, aunque el más utilizado es el extintor de polvo polivalente ABC.
El extintor ABC es uno de los aparatos de extinción de incendios más versátiles. Este extintor no solo es válido para apagar el fuego clase C. Como sus propias siglas indican, también se utiliza en incendios de clase A y B.
El polvo ABC apaga el fuego por inhibición, al interrumpir la reacción en cadena, y por sofocación, al aislar combustible y comburente (oxígeno). Este polvo forma una capa que aísla las llamas del oxígeno que las alimenta, sofocando así el incendio.
Los extintores de polvo tienen otras particularidades y ventajas, como el hecho de ser dieléctricos. Al no conducir la electricidad, son adecuados contra incendios en los que haya un componente de riesgo eléctrico. Se trata del extintor más utilizado para afrontar un fuego clase C.
Si quieres saber más sobre el extintor ABC, te lo contamos todo en este enlace.
El dióxido de carbono es un agente extintor habitual, también para apagar un fuego clase C. Los extintores de CO2 se utilizan menos que el polvo ABC en casos de fuego clase C, pero también ofrecen ventajas.
El extintor CO2 apaga principalmente por sofocación, desplazando el oxígeno, pero también tiene poder de enfriamiento. Al contrario que el extintor ABC, no deja residuos en forma de polvo, así que es apropiado cuando hay equipos delicados cerca del fuego. Además, tampoco conduce la electricidad.
No obstante, este extintor tiene algunos inconvenientes, como la pérdida de eficacia en exteriores. Si te interesan las ventajas y desventajas de utilizar un extintor CO2, te las explicamos en este enlace.
Estos son solo dos de los tipos de extintores, los más utilizados contra el fuego clase C. Hay otros tipos de extintores que se adecúan a diferentes situaciones o clases de fuego. Espuma AFFF, agua pulverizada... en el siguiente enlace puedes encontrar información sobre otros tipos de extintores y cuándo usarlos.
Un fuego clase C, un fuego clase A con presencia de riesgo eléctrico... Las situaciones de emergencia que se nos pueden presentar en nuestro día a día son muy variadas. Por eso, además de aprender a usar un extintor, es importante elegir el adecuado para cada fuego.
No siempre resulta sencillos entrenar todas las posibles casuísticas en un curso de uso de extintores. Encender fuegos de diferente tipo, alquilar instalaciones o diversos tipos de extintor... Los costes y la organización de una formación así la complican.
Las nuevas tecnologías como la realidad virtual aportan una solución a este problema. La realidad virtual recrea escenarios y plantea situaciones realistas como un incendio en oficina o almacén.
Un formador de prevención de riesgos puede poner a un empleado frente a riesgos de su día a día, como un fuego clase C. Al ponerse las gafas VR, el trabajador se encuentra ante un incendio y debe elegir el extintor adecuado para apagarlo.
Esta herramienta permite a los formadores dinamizar y potenciar sus entrenamientos. Los operarios practican los procedimientos viviendo un estrés realista, y pueden cometer errores y comprobar sus consecuencias.
¿Quieres conocer los beneficios de implantar la realidad virtual en tus formaciones de uso de extintores? Descúbrelos en este enlace.