El riesgo eléctrico es uno de los factores que se deben tener en cuenta a la hora de apagar un fuego. Reconocer este peligro es crucial a la hora de elegir un extintor adecuado para evitar accidentes o electrocuciones. Aquí te contaremos cómo hacer frente a un fuego con riesgo eléctrico.
En la clasificación actual de fuegos, el fuego eléctrico no aparece contemplado como tal, ya que se dividen generalmente por combustible. Si quieres conocer cuáles son los diferentes tipos de fuego en función de su combustible y cómo combatirlos, descúbrelo en este enlace.
No obstante, es muy importante conocer las implicaciones del fuego con riesgo eléctrico y cómo sortear ese peligro.
Un fuego con riesgo eléctrico es el que se origina cerca de aparatos eléctricos conectados, que suponen un peligro adicional para quien lo extingue. No es imprescindible que se origine directamente en el aparato o componente, con que haya uno cerca de las llamas ya existirá riesgo eléctrico.
El ejemplo de esto sería proyectar agua en una estantería en llamas, al lado de la cual hay una fotocopiadora conectada a la corriente. Se trata de un fuego con riesgo eléctrico, y como el agua es un agente conductor de la electricidad, habrá un gran riesgo de electrocución.
No todos los agentes extintores están indicados para hacer frente a un fuego con riesgo eléctrico. Afortunadamente, hay algunos que están formados por compuestos o gases dieléctricos, es decir, que no conducen la electricidad.
Si quieres saber más sobre los diferentes tipos de extintores y cómo utilizarlos, te dejamos la información en el siguiente enlace.
En las formaciones de uso de extintores, es difícil entrenar situaciones de riesgo realistas como el riesgo eléctrico. Es peligroso exponer a trabajadores a sufrir una electrocución real, por lo que se pierde el componente de concienciación. Sin embargo, hay una herramienta que permite incluir este tipo de situaciones en los entrenamientos sin peligro real: la realidad virtual.
La tecnología de realidad virtual (VR) reproduce escenarios y situaciones del mundo real en simulaciones. El usuario se sumerge completamente colocándose unas gafas, y experimenta sensaciones realistas mientras interactúa.
Esta herramienta ya se utiliza para impartir formaciones de seguridad y salud laboral, como la de uso de extintores. En la simulación, el formador puede configurar una situación de riesgo eléctrico, y el alumno debe elegir el extintor adecuado y utilizarlo correctamente.
Los empleados entrenan así su toma de decisiones, pudiendo cometer errores y sufrir accidentes virtuales. Si el alumno intenta apagar un fuego con riesgo eléctrico utilizando un extintor de agua, sufrirá una electrocución virtual y terminará en el hospital. Experimentar de primera mano las consecuencias de los errores ayuda a reforzar la concienciación.
¿Quieres conocer todos los beneficios de utilizar la realidad virtual para impartir formación de extinción de incendios? Descúbrelos en este enlace.