El extintor tipo D utiliza polvos especiales diseñados específicamente para apagar fuegos en metales. Este aparato actúa por sofocación, y hay diferentes tipos de polvos para cada fuego clase D.
Los fuegos en metales son unos de los más peligrosos en materia de extinción de incendios. Pueden producirse en metales combustibles como magnesio, sodio o titanio, sobre todo cuando están divididos en partículas finas.
Utilizar agentes extintores convencionales para apagar fuegos en metales puede suponer un grave riesgo para la salud. Un ejemplo de esto sería utilizar agua para tratar de extinguir un fuego originado en magnesio. Por todo esto, existe un aparato específico para estos fuegos, el extintor tipo D.
Es importante conocer las diferentes clases de fuego para saber cómo extinguirlo sin ponernos en peligro. Si aún no conoces todos los tipos de fuego según el combustible en el que se originan, te dejamos la información en el siguiente enlace.
Desde la invención del primer extintor en 1816, la técnica de extinción de incendios no ha hecho más que crecer y evolucionar. Los protocolos, técnicas y aparatos extintores se han desarrollado para hacer frente a situaciones y tipos de fuego concretos. El extintor tipo D es un claro ejemplo de ello.
Hoy en día, existen múltiples tipos de extintores para cada clase de fuego. Extintores de polvo ABC, extintor CO2... Puedes conocer los diferentes tipos de extintores en el siguiente enlace.
El extintor tipo D apaga el fuego por sofocación. Esto significa que cubre el fuego, aislando las llamas del oxígeno que las alimenta para sofocarlas.
No obstante, los fuegos en metales tienen características muy particulares. Las propiedades de los metales son muy distintas, y también lo son sus tipos de combustión.
Esto significa que un extintor tipo D adecuado para fuegos en algunos metales puede ser peligroso si se utiliza en otros. Dicho de otra manera, hay diferentes polvos para extintor tipo D, en función del tipo de metal y combustión.
Conocer los diferentes tipos de extintores y fuegos no es suficiente para saber cómo afrontarlos. Es muy importante impartir una formación de uso de extintores en empresas y centros formativos, para que empleados y personas de a pie sepan protegerse.
Sin embargo, para casos especiales como el del extintor tipo D, estas formaciones son más complejas. Encender un fuego en metal para dar una formación implica mayor peligro entrenar con otros incendios, además del impacto ambiental. Además, si el alumno se equivoca al elegir el extintor, puede sufrir daños graves.
Las nuevas tecnologías han llegado a este tipo de formaciones, para potenciarlas y añadirles un componente práctico sin riesgo real. La realidad virtual (VR) ya se utiliza para dar formaciones de uso de extintores realistas y dinámicas sin peligro ni contaminación.
La realidad virtual reproduce escenarios y situaciones de la vida real en simulaciones. Al colocarle las gafas a un alumno, el formador lo sitúa frente a una emergencia realista, como un fuego en una cocina o uno originado en metales.
El alumno debe tomar decisiones, como elegir el extintor adecuado, y utilizarlo siguiendo el protocolo correctamente. La posibilidad de cometer errores e incluso sufrir accidentes virtuales otorga a estos entrenamientos un mayor poder de concienciación y retención.
Esta tecnología permite entrenar situaciones peligrosas, como el uso de un extintor tipo D para apagar fuegos en metales, sin peligro real. Además, implica otros beneficios como el ahorro en costes o la reducción del impacto ambiental.
¿Quieres conocer otros beneficios de implantar la realidad virtual en formaciones de uso de extintores, o saber cómo utilizarla? Te lo contamos todo en este enlace.
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